A pesar de tener un buen cargo en mi trabajo (15 años como abogada en una gran constructora de Madrid), al ser madre la conciliación se tornó complicada.
Así que me concedí el permiso de perseguir mi sueño, a pesar de sentir un gran vértigo por el paso que iba a dar y decidí reinventarme profesionalmente, por lo que comencé por el aprendizaje. Me empapé de los conocimientos necesarios y me especialicé en una profesión que me permitía conciliar mi vida profesional y personal. Como Community Manager profesional, he logrado fusionar dos de mis pasiones, ayudar a los demás y el mundo digital.
He luchado con perseverancia por mi sueño. Hoy siento que ahora sí soy feliz, porque he convertido mi pasión en mi profesión.